Plotnitsky Axe es diferente de los demás. Tiene una forma especial de un hacha, óptima para un alcance grande y una posición conveniente de las manos. Por cierto, los propios trabajadores más profesionales hacen un hacha, logrando un aterrizaje «perfecto» en su mano. No debe haber baches en el mango. Debe distinguirse por una suavidad perfecta.